Santuario Nuestra Señora de los Milagros

UNA IMAGEN… UNA PALABRA

San Andrés y cualquiera de nosotros nos vemos reflejados en las expresiones de San Pablo de la primera lectura. Con nuestros labios profesamos que Jesús es el Señor, el Señor de nuestra vida, y nuestro corazón cree que Dios le resucitó y también nos va a resucitar a todos sus seguidores. Bien sabemos que Jesús no nos va a defraudar. No tiene nuestros fallos humanos y cumple siempre su palabra, cumple siempre sus promesas para esta vida y para la otra y en la amistad con él encontramos nuestra salvación.

Como Jesús nos ha convencido de que su mensaje no solo es buena noticia, sino la mejor noticia para vivir la vida humana, nos sale de dentro proclamar con nuestra vida y, en la medida de nuestras fuerzas, con nuestras palabras su evangelio. Eso fue lo que hizo San Andrés: gastarse y desgastarse para alegrar la vida de los hombres anunciado a Jesús y su evangelio. “Venid conmigo y os haré pescadores de hombres”.

Feliz día… Dios te bendice…