Como María…¡ábrele tu CASA y ACÓGELE!
1. VER: La familia
+En navidad pasamos más momentos en casa, disfrutamos de la familia, estrechamos lazos.
+Hay realidades que valoramos mucho: la familia es lo más importante para nosotros.
+Hacemos y comentamos el árbol genealógico de nuestra familia y un álbum con los momentos más importantes con la de Jesús.
¿Por qué es importante la familia? ¿Qué valoras de ella?
¿Qué recibes de tu familia? ¿Qué le aportas tú?
2. JUZGAR: La familia de Jesús
-En el evangelio de este domingo se nos habla de la familia de Nazaret, la de Jesús, José y María. Una familia que tuvo que salir huir fuera de su tierra, pobre. El anciano Simeón dice de él que es el “Salvador”, la “luz”… También se reconoce que “Jesús iba creciendo en sabiduría y gracia”. El Eclesiástico afirma: “Hijo mío, sé constante en honrar a tu padre, no lo abandones,” y Colosenses: “sea vuestro uniforme o lema: la misericordia entrañable, la bondad, la dulzura, el amor”. ¿QUÉ NOS QUIERE DECIR?
1. Algo tendrá la familia: Dios quiso nacer, vivir y ser educado en ella. En ella Jesús aprendió a amar sin condiciones y a sentirse querido, a darse a los demás, a colaborar, a rezar, a crecer como persona, a respetar al otro y ser respetado, a obedecer, a reír y disfrutar cada momento, a pedir perdón… “Jesús iba creciendo”.
2. No olvides: -No existen familias perfectas, sólo en las películas. La familia no es una casa acabada sino una semilla que se cuida y se riega a diario. –En al familia compartimos la vida y lo que tenemos. –En la familia crece nuestro corazón que, como los huevos en el nido, sólo se desarrolla sin hay calor, si existe cariño. –En la familia educamos en la fe, rezamos juntos, crecemos como hijos de Dios. –Hay dos familias muy importantes: la familia del mundo (somos todos hermanos) y la familia de la Iglesia (todos hijos de Dios).
¿Qué podemos mejorar en nuestra familia? ¿Cómo andáis de dulzura y amor?
3. ACTUAR: ¡Abre tu corazón, acoge a Jesús!
-Hacemos un cartel de la familia: “La familia es hogar, comunidad y santuario”. U otro que ponga: “Sin familia…” (y completamos lo que nos faltaría si no la tuviéramos.
-Programamos como orar en algún momento del día en familia. ¿Qué vais a hacer?