Desde primera hora de la mañana los peregrinos forman una marea de chalecos fluorescentes que se acercan al pie de María, una temperatura muy agradable nos recibe para empezar este segundo día.
Para la eucaristía de 8:30 h y con el Rosario de Aurora llegan las parroquias de Baños de Molgas, Almoite, Presqueira, Guamil, Ambia, Betán al Santuario que se encuentra a esa hora rodeado de una niebla matutina.
El día pasa con gran afluencia de fieles que aprovechan el sábado para venir al Monte Medo a honrar a la Madre.
A las seis de la tarde, la eucaristía radiada por la cadena Ser y presidida por el predicador oficial de esta novena, el Ilmo. D. Raúl Alfonso González, Vicario Episcopal para el Patrimonio y el sostenimiento de la Iglesia.
A las siete recibíamos, como estaba pronosticado, la tan necesitada lluvia en forma de tormentas llenándose la explanada de paraguas multicolor.
El Señor nos ha convocado a través de su Madre en este segundo día de la Novena para sentirnos familia en torno a la misma mesa eucarística.
La esperanza cristiana nace de la experiencia de sentirnos unidos y alimentados por el mismo Cuerpo y Sangre de Cristo, alimento del pueblo peregrino.
Hoy queremos presentar a la Virgen de los Milagros a todas las familias que peregrinan a este santuario durante estos días y a todas las familias del mundo, pidiendo especialmente por el cuidado atento de la vida en esa ecología humana de la que nos habla el Papa Francisco.
Pidamos hoy, como intención especial por Familia y cuidado de la vida
Pasó una mañana, pasó una tarde el día segundo.