Santuario Nuestra Señora de los Milagros

APERTURA DE LA PUERTA DE LA MISERICORDIA

Todos teníamos en mente una oración: 2016_02_13_puertamisericordia_milagros_008

«Madre de la misericordia, ruega por nosotros»…

Así comenzábamos esta mañana. Muchas nubes que amenazaban lluvia pero, a pesar de ello,

la gran afluencia a este Santuario para «abrir a porta santa»… que, de vez en cuando repetíamos,

«porta da misericordia»… 

A partir de las 10 de la mañana ya se respiraba en la explanada del Santuario el rumor de los fieles que se acercaban para tan magno acontecimiento. ¿A qué hora comenzamos? Estamos convocados para las 11 de la mañana. ¿Dónde empezamos? En la Capilla Penitencial… mientras llegaba la hora, muchos fieles prendían sus velas a la Virgen, otros tomaban su café de la mañana («salimos cedo para chegar ben»), otros rezaban a la Virgen…

Cuando las campanas del reloj hacían sonar las 11, el P. José Manuel, Rector del Santuario, iniciaba un ACTO PENITENCIAL. «Es conveniente disponernos para celebrar este acontecimiento y qué mejor que la confesión de nuestros pecados»… Una breve pero emotiva celebración que culminó con la confesión individual de los fieles. 15 sacerdotes ayudaban en este precioso ministerio.

11:45 horas: Suenan las campanas anunciando la llegada de nuestro Padre y Pastor, D. Leonardo. Se prepara la procesión de entrada. Los dos Diáconos D. José Manuel y D. Yerai, portan la Cruz y el Evangeliario, le siguen los sacerdotes revestidos con alba, estola y casulla y el Sr. Obispo revestido para la ocasión. Todos nos dirigimos a la Capilla Penitencial donde comienza la primera parte de la celebración. Una vez terminada, con la Cruz y el  Evangeliario al frente, seguidos por el Sr. Obispo, sacerdotes y fieles, nos dirigimos a la Puerta de la Misericordia. Al salir parece que el cielo quiere unirse enviando unas pocas gotas que hacen abrirse todos los paraguas… Llegados a la Puerta Santa el Sr. Obispo canta: «Esta es la puerta del Señor: por ella entramos para obtener misericordia y perdón», empuja la puerta y está se abre. El Sr. Obispo toma el Evangeliario, se coloca en medio de la Puerta mostrando el Evangeliario a la veneración de los fieles y dice: «Yo soy la puerta -dice el Señor-: quien entre por mí se salvará y podrá entrar y salir, y encontrará pastos».

El Incensario, la Cruz procesional, los ciriales, el Sr. Obispo portando el  Evangeliario (rodeado de los siete cirios que representan a todo nuestro Arciprestazgo), sacerdotes, y fieles (pasando por la Puerta de la Misericordia), se dirigen al Santuario. El coro entona los cantos apropiados. Una vez dentro del Santuario, se venera el Altar, hacemos memoria de nuestro Bautismo y continúa la celebración de la Eucaristía.

Damos gracias a Dios, que nos ha permitido celebrar con tanta solemnidad este apertura de la Puerta de la Misericordia en este Santuario. Gracias a todos los sacerdotes y diáconos participantes, gracias a todos los que habéis preparado con esmero esta preciosa celebración y habéis participado: con lecturas, con los cantos, portando las velas, etc, etc., etc…, y especialmente, GRACIAS a todos vosotros fieles devotos de la Virgen de Los Milagros que, una vez más, habéis dado muestras de vuestro cariño y afecto a este Santuario. Y gracias a todos, los que no habéis podido asistir físicamente pero sabemos que lo habéis hecho desde vuestros hogares, seminario, etc… Ella, la Madre, conoce el corazón y os conoce por vuestros nombres y apellidos… ¡adelante!

Que Ella, la Madre de la Misericordia, interceda por todos vosotros.

Ya tenemos abierta la Puerta de la Misericordia… no tengamos miedo de pasar por ella… os esperamos a todos…