Es difícil rebobinar la película de nuestra vida
y no encontrar un momento de emoción contenida y vivida a los pies de Santa María Virgen.
Ese sentimiento, emocionado y agradecido, lo queremos simbolizar con la flor “petunia”.
A pesar de los chaparrones fuertes …a las pocas horas se recupera con la misma fuerza y perfume del primer día.
Cruzar el umbral de la puerta de una Iglesia y buscar la figura de Santa María es saber que la Madre siempre intercede ante Dios para que nosotros, sus hijos, nos levantemos victoriosos y fortalecidos después de las numerosas pruebas y caídas que nos da la lucha por nuestra supervivencia.
“Un hombre sin fe es alguien que navega a merced de las circunstancias” (J.C.Hare)