Está bien esa sensación de que algo te falta.
De hecho, tal vez sería terrible llegar un día, sentarse y decir: ya está.
Tengo todo lo que podría desear. Porque el deseo nos mueve, nos empuja y nos lleva a luchar.
Otra cosa es que muchos de nuestros deseos (ojalá) no sean egoístas, autocentrados.
Es posible que, si hablo de tener, yo tengo suficiente en muchas dimensiones de la vida. Y, sin embargo, que me siga inquietando el mundo, las asignaturas pendientes de personas, pueblos y sociedades…
¿Qué deseos te mueven en este momento? ¿Qué metas persigues?
FELIZ DIA A TODOS...