Avanzamos un día más en esta Novena, empezamos el día con la Eucaristía de 7:30 h. presidida por el Rector del Santuario, quien a continuación es el encargado de la acogida de los peregrinos que llegan para poner al pie de la Madre sus inquietudes con el Rosario de Aurora.
En el día de hoy recibimos a las parroquias de Lamamá, Arnuide, Maus, Porto, quienes acompañados de las cruces procesionales rezan los últimos misterios por la explanada de camino a celebrar la Eucaristía de 8:30 h.
El tiempo, aunque nublado no termina de cuajar en la tan necesitada lluvia. Aumentan el número de devotos que se acercan a este Monte Medo, día a día,
Avanzan los días y van aumentando el número de peregrinos a este Monte Medo. Con medidas de seguridad, distanciamiento social, aforo controlado y limitado al interior del Santuario… la explanada se llena de devotos que participan de las Eucaristías desde el exterior del templo y que pasan a saludar a María.
A media mañana, y debido a que varios de los árboles de la explanada están secos por la acción de un hongo, para suplir la falta de hojas, se han instado unas carpas a fin de poder participar de la Eucaristía desde la explanada y cobijarse del sol.
La Eucaristía de 7 de la tarde, presidida por el predicador oficial de esta Novena el Excmo. Y Rvdmo. Dr. D. Francisco José Prieto Fernández, Obispo Auxiliar de Santiago de Compostela nos recordaba que hoy es un día muy especial en el marco de esta Novena, ya que queremos pedir a la Virgen de los Milagros por todos sus hijos sacerdotes. Sin ellos, no hay Eucaristía; sin ellos, no hay Iglesia. Ellos son como María: ¡traen a Dios al mundo! El sacerdocio sigue siendo una vocación apasionante y necesaria en la sociedad actual. Pedimos hoy, como intención especial, por los sacerdotes, por los seminaristas de nuestra Diócesis y por el aumento de las vocaciones sacerdotales
Pasó una mañana, pasó una tarde el día cuarto.