A las seis de la madrugada se abren las puertas del Santuario y se recibe personalmente por un grupo de sacerdotes y seminaristas a la peregrinación de jóvenes que a pesar del cansancio y la fatiga llegan alegres al pie del altar de la Madre para celebrar a las 7:30 h. la primera Eucaristía de este día, presidida por el Rector del Santuario.
En este quinto día de la Novena a nuestra Virgen de los Milagros, nos acercarnos a la que es Maestra de toda la vida espiritual de los cristianos porque supo llenar su corazón de la Misericordia del Padre. A Ella le alcanza el título de Misericordiosa y la alabanza que Jesús pronunció para todos los que así actúan: “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia”.
Todas las bienaventuranzas evangélicas definen a María, pero tal vez ésta, con mayor motivo. Ella expresa la actitud ante Dios y ante los hermanos. María lo vivió con verdadera entrega, por eso Ella es modelo y estímulo para todos, especialmente para los jóvenes, a los que recordamos en la intención especial del día de hoy, y es expresión de un nuevo y permanente modo de evangelización. Junto a María, encontramos siempre la fórmula perfecta para anunciar a Jesucristo.
En el día de hoy celebramos los 50 años de servicio de Sor Josefa Teixeira que en sus 50 años de Hija de la Caridad y sus más de 40 de labor incansable en las Novenas de este Santuario.
Un día nuevamente predominado por las altas temperaturas.
Pasó una mañana, pasó una tarde el día quinto.