Santuario Nuestra Señora de los Milagros

ES DOMINGO… EL DÍA DEL SEÑOR

La liturgia de este 3º domingo de Cuaresma nos hace caer en la cuenta 5 - 3 Semana

de la eterna preocupación de Dios por conducir a los hombres hacia la vida nueva.

En ese sentido, la Palabra de Dios que se nos propone

ofrece sugerencias diversas de conversión y renovación.

En la primera lectura, Dios nos ofrece un conjunto de indicaciones (“mandamientos”) que deben conducir nuestro camino por la vida.

Son indicaciones que se refieren a las dos dimensiones fundamentales de nuestra existencia: nuestra relación con Dios y nuestra relación con los hermanos.

En la segunda lectura, el apóstol Pablo nos sugiere la conversión a la lógica de Dios… Es preciso que descubramos que la salvación, la vida plena, la felicidad sin fin no se encuentra en una lógica de poder, de autoridad, de riqueza, de importancia, sino que está en la lógica de la cruz, esto es, en el amor total, en la donación de la vida hasta las últimas consecuencias, en el servicio sencillo y humilde a los hermanos.

En el Evangelio, Jesús se presenta como el “Nuevo Templo” donde Dios se revela a los hombres y donde les ofrece su amor. Nos invita a mirar a Jesús y a descubrir en sus indicaciones, en su anuncio, en su “Evangelio” esa propuesta de vida nueva que Dios nos quiere presentar.