SANTIAGO APÓSTOL
La liturgia nos propone centrar nuestra atención en la figura de «Santiago, apóstol», el primero de los Doce en derramar su sangre por el Maestro, en beber su cáliz.
El mensaje es nítido. Seguir a Jesús no significa tanto repetir sus palabras, o hacer sus milagros, cuanto dar la vida como él la dio.
Por tanto, en el discernimiento acerca de qué es cristiano, el criterio definitivo es el de “dar la vida”. Sigue verdaderamente a Jesús quien entrega su vida.
FELICIDADES A TODOS LOS QUE LLEVÁIS ESTE NOMBRE…
FELICIDADES A ALAS PARROQUIAS CUYO TITULAR ES SANTIAGO