Entiendo, Señor, que todo lo que convertimos en absoluto,
en innegociable y exclusivo, si no tiene que ver contigo, es tramposo.
Por eso te pido hoy, Señor,
que me ayudes a vivir con un corazón pobre,
con un corazón sencillo,
sin atarme a seguridades, talentos, riquezas o fortalezas que encadenan y anulan.
Me dispongo a salir a tu encuentro, dejando en el camino riquezas y certidumbres
BUEN DÌA TODOS